3. Recordándote de día y de noche.

Miles de recuerdos de una noche estrellada. En mi ventana, recordandote, de día y de noche. Todavía hay tiempo para hablar las cosas otra vez. Sé que me olvidaste, estoy completamente seguro. Unas finas gotas golpean el cristal de mi ventana. Sé que estás cerca de mí, lo siento. Pensando, reflexionando, meditando. Ocupas el 99 % de mis pensamientos. Sal ya, déjame en paz. No quiero pensar en tí. No consigo olvidarte. Demasiados gritos, demasiada ira contenida. Necesito descargarme, pero le dare un descanso a mi almohada. Ella es la única que sabe por todo lo que he pasado. En fín, sigo meditando hasta que mis pensamientos se convierten en mis sueños. Descansar de pensar en tí. Sal de mis sueños.

4. No te olvidé.

Hola, soy yo. ¿Te acuerdas de mí? Bueno, ha pasado mucho tiempo. ¿Cómo estás? ¿Va todo bien? A mí no me va nada bien. Te hecho de menos, ¿para que mentirte? Pienso en tí constantemente. Han habido tantos recuerdos. Pero para que engañarse, no se van a volver a vivir. No puede ser, las cosas como son. No vamos a volver a vernos, nuestras miradas jamás volverán a cruzarse, y nuestros corazones, no volveran a engañarse. Te quise. Te quiero. Por tí hice locuras, por tí sufrí, viví, fuí feliz. Se acabo todo. Tú quieres a otro. Pues bueno, las cosas son así, por desgracia. Yo ya he echo suficiente. No puedo cambiar nada. Adiós, que te vaya bien. Pero seguro que no nos volveremos a ver.

3. Mil caminos.

Necesito tantas respuestas, a miles y miles de preguntas. Necesito saber la realidad, encontrar mi camino entre esos miles que hay escondidos por el mundo. Descubrir el secreto de la vida, que lleva poniéndonos a prueba desde el día en que nacimos. Meses, semanas, días, buscando soluciones, cuando no tengo claro el problema. Si no se mata el problema desde la raíz, vuelven a nacer. Pero no desaparecerán, son problemas, son pequeños exámenes que nos pone la vida, hay que solucionarlos. Ganar. ¿Perder? Es una palabra que no aparece en mi diccionario. Mi diccionario de la vida, mil palabras, mil definiciones. Ganar, luchar, vencer, disfrutar, saltar, vivir, sentir. Mil sensaciones, mil secretos. Mil caminos, descubre el tuyo.

2. Vivimos en nuestro mundo.

Todos tenemos una burbuja aislada de toda la realidad. A esa burbuja la llamamos nuestro mundo, nuestra vía de desconectar de toda la realidad, nuestra manera de soñar, de imaginar, de ser felices a nuestra manera, sin que nadie pueda criticarnos. Nuestra manera de hacer que sonriamos cuando nos sentimos solos. Un pequeño mundo donde nuestros sueños que parecen imposibles se cumplan con facilidad. Todo parece bonito, pero hay veces que, nos sumergimos demasiado en nuestro pequeño mundo, nuestra pequeña burbuja, y no vemos la realidad: Que con un poco de esfuerzo, todos nuestros sueños pueden hacerse realidad.

1. Empezar de cero.

Dicen que los cambios van bien, pero no siempre es así. Me he dado cuenta de que hay que pensar antes de actuar. Puedo arrepentirme de mis acciones, y sé que no hay vuelta atrás. Sigo siendo ese aprendiz de la vida, que va aprendiendo de ella. Plasmo mis pensamientos en una hoja en blanco, quizás sea para desahogarme, quizás sea un pasatiempo. O quizás sea por que lo necesito. Elijo esa opción, sí. Es porque lo necesito. Porque necesito expresarme a mi manera, expresar mis pensamientos, mis emociones, mis pensamientos. Mis dudas respecto a este largo reto: La vida. Quiero empezar de cero, y lo haré. Este es un buen comienzo.